La provincia de Buenos Aires vive este domingo 7 de septiembre una jornada electoral clave, en la que más de 14 millones de bonaerenses están llamados a las urnas para renovar parte de la Legislatura y los concejos deliberantes municipales.
Se trata de una votación histórica, ya que por primera vez desde 2003 se realiza de manera desdoblada del calendario nacional, lo que convierte a estos comicios en un verdadero termómetro político de cara a las elecciones legislativas del 26 de octubre.
Desde las 8 de la mañana, las mesas comenzaron a recibir votantes en un clima de expectativa que atraviesa tanto a la ciudadanía como a la dirigencia política. En juego están 46 bancas de diputados y 23 de senadores provinciales, además de la composición de los concejos municipales y los consejeros escolares, cargos que marcarán el equilibrio de poder en la provincia liderada por el desastroso gobernador ultra kirchnerista Axel Kicillof.
La contienda, seguida de cerca por la Casa Rosada y la oposición, se interpreta como un test decisivo para el presidente Javier Milei y para el peronismo. Los primeros resultados se esperan para después de las 21 horas o cuando hayan sido escrutadas el 30% de las mesas, aunque a lo largo de la jornada se anticipa un minuto a minuto cargado de definiciones políticas y la mirada nacional puesta en el distrito electoral más grande del país.