Ozzy Osbourne, ícono del rock y fundador de la legendaria banda Black Sabbath, falleció el martes dejando una huella indeleble en la historia de la música. Pero detrás del show, los riffs electrizantes y su apodo de “Príncipe de las Tinieblas”, se escondía un hombre que no dudó en alzar la voz en defensa de los judíos en tiempos de creciente hostilidad.
Aunque fue criado en la Iglesia de Inglaterra, su vida dio un giro significativo al casarse con Sharon Osbourne, hija del promotor musical judío Don Arden.
Sharon reveló que la empatía de Ozzy por el pueblo judío creció con los años y que se mostraba consternado ante el recrudecimiento del antisemitismo a nivel mundial.
“Ozzy está totalmente desconcertado y no para de preguntarme por qué hay tanto odio contra los judíos”, dijo Sharon en diciembre de 2023. “¿Qué puedo responderle?”

La solidaridad de Osbourne no se quedó en lo privado.
En 2024, se unió a más de 200 figuras del mundo del espectáculo y los negocios en la firma de una carta que exigía una investigación sobre el sesgo sistemático contra Israel en la BBC.
Fue un gesto que muchos consideraron valiente, especialmente en una industria donde el apoyo a Israel suele ser silenciado o castigado.
Pero quizás su acto más resonante se produjo un año antes, cuando negó al rapero Kanye West (Ye) el uso de un sample de su música. En una publicación en redes sociales, Ozzy fue categórico: “Rechacé su solicitud porque es un antisemita. No quiero tener ninguna asociación con ese hombre”.
Osbourne visitó Israel en dos ocasiones, ambas veces para ofrecer conciertos que terminaron siendo históricos.
El 29 de septiembre de 2010 encabezó el Ozzfest en el Parque Hayarkon de Tel Aviv ante miles de fanáticos. Durante esa visita, él y Sharon recorrieron la Ciudad Vieja de Jerusalén, el Muro de los Lamentos y el Museo del Holocausto Yad Vashem.
Ocho años más tarde, regresó como parte de su gira de despedida No More Tours 2, con una actuación en Rishon LeZion el 8 de julio de 2018.
Su presencia fue recibida con entusiasmo tanto por los fans como por los medios locales, que destacaron la importancia de figuras internacionales que no temen actuar en Israel pese a la presión del movimiento BDS.
Sharon Osbourne, cuya herencia judía fue una constante en su vida familiar, ha sido explícita en su conexión espiritual: “El judaísmo es la única religión que tengo, y la única con la que me siento cómoda”, declaró en enero de 2024.
Con ella, Ozzy formó una familia que muchos consideran un símbolo de diversidad y apertura cultural.
Sus tres hijos —Jack, Kelly y Aimee— crecieron en un entorno impregnado de tradiciones judías y sensibilidad interreligiosa.